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Estrategia de examen

Ofipol


EXPLICACIÓN A LA PREGUNTA DEL MONO EN REDES SOCIALES


‪Si a un mono le das un examen de Policía Nacional con las primeras 50 preguntas acertadas, y el mono tiene que obligatoriamente contestar las otras 50...‬

¿Aprobaremos el examen?
¿Qué pensáis?
La respuesta es SÍ.
El mono aprobará casi todas las veces que haga este experimento.

Ya sabéis que cada pregunta tiene 3 opciones de respuesta, lo cual significa que estadísticamente acertará 1 de cada 3 preguntas cuando se contesta al azar y fallará 2 de cada 3.

La fórmula de corrección del examen de la Policía Nacional se llama "Fórmula de Corrección del Azar", cuyo objetivo es neutralizar el posible sesgo que pueda jugar el azar.

Esta fórmula nos dice que se debe eliminar 1 pregunta acertada por cada 2 preguntas erróneas.

¿Qué pasará con el mono? El mono casi siempre obtendrá unos resultados muy parecidos a los siguientes: acertará 16.66 preguntas y fallará 33.33. Al aplicar la fórmula, los 16.66 aciertos serán eliminados por los 33.33 fallos, y se quedará en 0. Es decir, esas 50 preguntas contestadas al azar por el mono no habrán supuesto ninguna variación en el 5 inicial con el que se partía. Así que sí, aprobará.

Y alguno dirá, pero oye, ¿y no es posible que el mono acierte menos de 16? Es posible, pero muy muy improbable. Es la misma probabilidad de que tengas pleno al quince en la quiniela... ¿es posible? sí, ¿es probable? ya sabéis que no.

Ahora bien ¿los humanos contestamos como los monos? No.

Aunque un humano no tenga ni idea de una pregunta y piense que está contestando al azar, su grado de acierto siempre está un poco por encima del 33%, ¿y a qué se debe? A que tenemos "intuición". Eso quiere decir que hay conocimientos adquiridos en lo más profundo de nuestro cerebro que ni siquiera sabemos que están ahí, pero que implica que ese 33% de acierto que nos daría el azar se convierta siempre en un poquito más, y eso hará que tener la mano ligera al contestar signifique ir ganando décimas poco a poco al que tenga la mano agarrotada.

Y quien diga, yo soy un cenizo y siempre que me arriesgo la fallo. MENTIRA. Eso es una falsa percepción pesimista inherente al ser humano de fijarse más en los errores que en los aciertos.

Cuando alguien me dice que ha suspendido por arriesgar, yo le digo, si no hubieras arriesgado habrías suspendido con peor nota.

¿Todo esto significa que puedo aprobar sin estudiar? Ni de coña. Si haces las 100 preguntas al azar, acertarás unas poquitas más de 33, es decir, sacarás un poquito más de un cero. ¿Y entonces qué relevancia tiene? Muchísima, porque sacar un 0.4 en vez de un 0 da igual, pero sacar un 5.2 en vez de un 4.8 significa conseguir el aprobado, y en estas últimas cifras es donde se mueve el gran grueso de los aspirantes.

La situación es la siguiente:

1. Opositor con muchísimo conocimiento del temario: siempre aprueba, independientemente de su estrategia.

2. Opositor con poco conocimiento del temario: siempre suspende, independientemente de su estrategia.

3. Opositor con buen conocimiento del temario + mano agarrotada: suele suspender.

4. Opositor con buen conocimiento del temario + mano ligera: suele aprobar.

Casi todo el mundo está en los puntos 3 y 4, por favor, sé inteligente y pasa ya del punto 3 al 4. Son matemáticas, ni más ni menos.


EXPLICACIÓN GENERAL DE LA ESTRATEGIA DE EXAMEN


El deseo de OFIPOL no es hacer una recomendación absoluta sobre cómo se debe hacer  el examen sino intentar explicar qué papel juega el azar y la estadística a la hora de decidir el nivel de riesgo que vamos asumir.

Como todos sabréis, el examen para la escala básica  de la Policía Nacional son 100 preguntas tipo test con 3 alternativas de respuesta a realizar en 50 minutos. El aprobado está en un 5, es decir, en obtener 50 puntos netos.

La fórmula de corrección que usan los examinadores es la que se denomina "fórmula de corrección del azar", y es la siguiente: 

A – E/ (n-1) ,     siendo:

A : número de aciertos.

E: número de errores.

n: número de alternativas de cada pregunta.

Esta fórmula es la que se usa en la mayoría de exámenes tipo test en cualquier ámbito, y lo que busca es que el azar no juegue ni a favor ni en contra, y me explico: si pones a un mono a hacer el examen de Escala Básica, la estadística nos dice que acertará  al azar una de cada 3 preguntas , ya que cada pregunta tiene 3 opciones de respuesta.  Eso significa que acertará 33,3 preguntas y fallará 66,6. Si aplicamos la fórmula, observamos lo siguiente: 

33,3 aciertos - 66,6 fallos / 2 = CERO

Es decir, el mono sacará un cero en el examen, que es la nota que se merece al  no tener ni idea del temario. El hecho de haber realizado el examen de forma aleatoria no tiene por qué provocar que saque puntos positivos ni puntos negativos, sino que se quedará igual que si no hubiera contestado ninguna pregunta.


Veamos los tres tipos de estrategias que existen a la hora de afrontar el examen.


NIVEL DE RIESGO "BAJO": SOLO CONTESTO LAS "SEGURAS"

Hay que tener en cuenta que el temario en esta oposición es prácticamente infinito, y eso se demuestra en que la nota del mejor opositor de cada año raramente sube de un 8, es decir, 80 preguntas netas. Así que un opositor con un conocimiento medio-alto se suele saber unas 64 preguntas "seguras".

Por experiencia de muchos años se sabe que lo que uno considera "seguro" tiene un margen de fallo entre un 10 y un 20%  (por mala interpretación de la pregunta, fallo de lectura, cambio en una ley a última hora...).   Lo vamos a establecer en un 15%, que es el más común, para explicar los diferentes ejemplos.

¿Qué pasaría entonces con un opositor que se sabe 64 "seguras" y asume riesgo "bajo"?:

Contestadas: 64

Acertadas (85% de 64): 54

Falladas (15% de 64): 10

En la fórmula tendría 54 - 10/2= 49  : 4,9   SUSPENSO 

Esto puede explicar que opositores de varios años de experiencia con un buen conocimiento de la materia, acaben suspendiendo rozando el 5. Su percepción de hacer una examen con seguridad es irreal, por lo tanto, lo que supuestamente era asumir un riesgo "bajo" acaba convirtiéndose en un alto riesgo de suspender.


NIVEL DE RIESGO "MEDIO". CONTESTO LAS QUE DUDO ENTRE 2

Pongamos el mismo ejemplo para que sea más intuitivo y supongamos que el opositor contesta 64 "seguras" y en las otras 36 duda entre dos opciones y las contesta siempre. 

Contestadas: 100

Seguras 64. De estas acertará 54.

Dudosas entre 2 opciones: 36. De estas acertará 18.

El opositor acertará 54 de las 64 preguntas que pensaba que eran "seguras", igual que hemos dicho antes, y de las otras 36, acertará, por estadística, la mitad, 18, porque está dudando entre dos opciones.

En total tendrá  72 aciertos y 28 fallos, que aplicados a la fórmula nos daría lo siguiente:

72 - 28/2= 58: 5,8    APROBADO.   El opositor ha pasado de tener un 4,9 a tener un 5,8.


NIVEL DE RIESGO "ALTO": CONTESTO LAS QUE DUDO ENTRE TRES

Utilizamos el mismo ejemplo, pero en este caso  en las 36 preguntas duda entre las 3 opciones pero aun así contesta.

Contestadas: 100

Seguras: 64. De estas acertará 54.

Dudosas entre 3 opciones: 36. De estas acertará 12.

Este opositor acertará 54 de las 64 preguntas "seguras", como hemos dicho antes, y de las otras 36 acertará, por estadística, una de cada tres, es decir, 12 preguntas, porque siempre duda entre tres opciones. 

En total tendrá  66 aciertos y 34 fallos , que aplicando la fórmula:

66 - 34/2= 4,9   SUSPENSO, MISMA NOTA QUE CON RIESGO "BAJO".


Esto son ejemplos teóricos, la realidad es que de las preguntas que no te sabes "seguras", habrá algunas que dudes entre 2 y otras que dudes entre 3. Lo que hay que entender es que dudando entre dos el azar juega a tu favor para ganar puntos, y dudando entre tres el azar no va ni a favor ni en contra.


¿Eso significa que no puedo sacar una nota globalmente menor si me arriesgo y contesto las dudosas que si solo contesto las "seguras"? Por supuesto que sí. La estadística solo se cumple obligatoriamente si el número de preguntas es infinito. Podría pasar, por ejemplo, que fallaras todas en las que dudas entre dos, pero siendo posible, es muy muy improbable.


Estos ejemplos que hemos puesto con un opositor de conocimiento medio-alto, son extrapolables a opositores de nivel medio o bajo, ya que  los márgenes de ganancia de puntos sobre su nota según el riesgo serían los mismos, de la siguiente manera:


- Si dudas entre dos opciones  y no contestas: 0 puntos netos.

- Si dudas entre dos opciones y contestas: la mitad de preguntas las fallas y la mitad la aciertas,  es decir:

1 acierto - 1 fallo / 2 = 0.5 puntos. Por cada 2 preguntas que dudes entre 2 opciones  y contestes, ganas 0,5 puntos netos.

- Si dudas entre tres opciones y no contestas: 0 puntos netos.

- Si dudas entre tres opciones y contestas: aciertas una de cada 3 preguntas, es decir: 1 acierto - 2 fallos / 2 = 0 puntos. 

Teóricamente no hay diferencia entre contestar o no contestar en las que dudes entre las 3 opciones.


La realidad es que hay muchas cosas que sabemos pero que no sabemos que las sabemos. Cuando pensamos  que estamos contestando puramente por azar, realmente no es así, eso que llamamos INTUICIÓN tiene una base racional aunque no lo  lleguemos a percibir,  que hace que normalmente aciertes algo más de lo que por estadística te tocaría, y por lo tanto, haría favorable la asunción del riesgo máximo.


Está estudiado que cuando uno cambia una respuesta que marcó "de primeras" por intuición, tiene las de perder.


TRUCOS PARA LUCHAR POR EL ACIERTO EN LAS PREGUNTAS EN LAS QUE NO TIENES NI IDEA

Si algún día os da por intentar crear un examen  tipo test de 100 preguntas sobre cualquier materia, os daréis cuenta de lo difícil que es, y lo fácil que es caer en ciertas rutinas que sistemáticamente se aprecian en los exámenes tipo test, y que son las siguientes:

El creador del examen inconscientemente está más alerta en la opción que va a poner como correcta que en la que va a poner como incorrecta, por lo tanto, si alguna de las opciones no concuerda en género y/o número con el enunciado de la pregunta, es más probable que  no sea la opción correcta. Si alguna de las opciones tiene un error tipográfico u ortográfico,  también es más probable que no sea la cierta, por la misma razón que acabamos de decir.

También el que genera el examen estará interesado en que la que pone como cierta no sea impugnada,  y eso conlleva normalmente que se extienda en su explicación y sea más detallada. Por lo tanto, las opciones más largas tienen más probabilidad de ser correctas que las opciones cortas.  Piensa además que crear una respuesta larga que no sea correcta implica un esfuerzo imaginativo importante por parte del examinador,  así que normalmente se "miente" con opciones cortas.

El examinador, para crear opciones verdaderas, solo tiene que describir una realidad, y para crear opciones falsas, tiene que inventarse algo, lo cual es más difícil. Por lo tanto, las preguntas más fáciles de crear son las que tienen 2 opciones verdaderas y una tercera que pone que las otras dos opciones son verdaderas. Así que la opción que dice "todas son verdaderas" tiene más probabilidad de ser cierta que las otras dos opciones. De hecho, el Tribunal emitió una nota interna en 2019 para recomendar a los miembros encargados de poner las preguntas que no usaran la opción C de "todas las respuestas son verdaderas" porque suponía un sesgo positivo a favor del opositor avispado.

Las opciones con palabras absolutas tipo siempre o nunca es difícil que sean ciertas, ya que implica que no exista ninguna excepción a esa regla, y eso es difícil de encontrar.

Las opción que menos relación guarda con las otras normalmente no es cierta.

Es frecuente encontrar la respuesta a alguna pregunta  porque aparezca de forma implícita en otra pregunta. 

Lo más importante, lógicamente,  es saberse el temario, y sin eso no conseguiremos nada, pero la estrategia con la que uno afronta un examen tipo test es crucial.  El máquina que se sabe todo, aprobará independientemente de cómo  haga el examen, y el que no haya estudiado nada, suspenderá haga lo que haga, pero el gran grueso de la gente normal, podrá suspender o aprobar dependiendo de la estrategia con la que afronte el test.


RECORDAD, EL ÚNICO TRUCO QUE SIEMPRE FUNCIONA ES ESTUDIAR, ESTUDIAR Y VOLVER A ESTUDIAR.


En Ofipol llevamos empeñados varios años en concienciar a nuestros alumnos de todas estas consideraciones, y la mejor forma de que lo interioricen es que vean con sus propios ojos que el riesgo compensa, y esto lo llevamos a cabo con la herramienta de Nota con Riesgo, que permite que el alumno vea en todos los test online que realiza la nota que ha sacado y la nota que hubiera sacado asumiendo más riesgo (Nota con Riesgo). A medida que observan que la Nota con Riesgo casi siempre es mayor que la nota real, van cambiando progresivamente la forma en la que afrontan el examen hasta llegar al examen oficial con una estrategia definida que no deberán cambiar bajo ningún concepto, ya que la variabilidad con respecto al resto estará en la mano del opositor y no en la dificultad del examen que te pongan.